
Su vida gira alrededor de un balón: ex jugador del Real Madrid, hijo y padre de futbolista y, actualmente, entrenador del Getafe. Fue pionero en triunfar sobre el césped con algo más que dos buenas piernas: valores, cerebro y estilo. Parece su filosofía de vida.Nos recibe en su terreno, el campo del Getafe C. F., donde la temporada pasada, gracias a un golazo en el último minuto, se aseguraron otro año de felicidad en Primera. Pasada la borrachera de triunfo, ahora toca currar. Pero eso no le asusta a este profesional que se niega a aceptar que el fútbol lo es todo en la vida.
Os salvasteis en el último minuto, en el último partido... ¿Te ha cambiado la vida la pasada temporada?
Mucho. Me cambió las últimas cinco semanas y más en el último minuto. Una alegría natural... Por cierto, estoy sorprendido de que hayas venido a hacerme una entrevista.
¡Es que ya eres un entrenador de Primera! Porque eres una persona con mucha suerte, pero también has tenido que salvar muchos baches...
Pero de eso se trata. Uno no puede estar arriba sin una base sólida. Ni quedarse ahí siempre, o los enemigos acaban contigo. He tenido suerte porque, cuando no me salen las cosas bien, tengo mucha gente alrededor que me protege.
Viviste el éxito en una época en la que los futbolistas eran estrellas, pero no tanto como ahora.
No tenía nada que ver. Hoy, los futbolistas tienen tanta importancia como desconocimiento de que la tienen. El tema se ha desorbitado...También han descubierto las peluquerías [ríe]...
¿En tu época había futbolistas con mechas?
En mi época los que nos dábamos cremas y llevábamos un corte de pelo diferente éramos sospechosos. Ahora seríamos naturales... [ríe].
Os salvasteis en el último minuto, en el último partido... ¿Te ha cambiado la vida la pasada temporada?
Mucho. Me cambió las últimas cinco semanas y más en el último minuto. Una alegría natural... Por cierto, estoy sorprendido de que hayas venido a hacerme una entrevista.
¡Es que ya eres un entrenador de Primera! Porque eres una persona con mucha suerte, pero también has tenido que salvar muchos baches...
Pero de eso se trata. Uno no puede estar arriba sin una base sólida. Ni quedarse ahí siempre, o los enemigos acaban contigo. He tenido suerte porque, cuando no me salen las cosas bien, tengo mucha gente alrededor que me protege.
Viviste el éxito en una época en la que los futbolistas eran estrellas, pero no tanto como ahora.
No tenía nada que ver. Hoy, los futbolistas tienen tanta importancia como desconocimiento de que la tienen. El tema se ha desorbitado...También han descubierto las peluquerías [ríe]...
¿En tu época había futbolistas con mechas?
En mi época los que nos dábamos cremas y llevábamos un corte de pelo diferente éramos sospechosos. Ahora seríamos naturales... [ríe].
0 comentarios:
Publicar un comentario