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Sirvent publica su primera obra sobre la búsqueda de la felicidad

María Sirvent es la autora de Si supieras que nunca he estado en Londres, volverías de Tokio.
Diana Sánchez /Jaén
La felicidad está en uno mismo, el problema está en que hay que buscarla y no tiene por qué hallarse en Inglaterra. Así, psicoanaliza a la protagonista de la novela Si supieras que nunca he estado en Londres, volverías de Tokio la autora de la obra María Sirvent. La iliturgitana promete con su primer libro. Su amor por la escritura la absorbió en distintos relatos en los que sus personajes le permitían construir nuevos mundos, escenarios y realidades. Hasta que un día, se le interpuso la peculiar Ágata Ponce. “Me pareció muy jugoso su tono”, expresa la autora María Sirvent. Y es que el personaje literario se perfila como una treintañera que trabaja en una oficina y cuya principal manera de comunicarse es el correo electrónico. De ahí, se fue gestando la primera novela de Sirvent Si supieras que nunca he estado en Londres, volverías de Tokio. Una obra en la que la escritora da vida a una mujer que desea que la echen de su trabajo, pero que es la cubierta de lo que realmente guarda: la búsqueda de la felicidad. Para ello, Ágata Ponce se desahoga a través del género epistolar actual, esto es, el correo electrónico. “Recurro a esto porque es una novela contextualizada en la actualidad, no es por innovar”, explica. Y es que, como indica el extenso título, la realidad es que Ágata no está en Londres, aunque en los mensajes que le envía a su ex pareja —que sí vive en Tokio— asegura que todo le va bien desde la capital británica. “Es una mentirosa compulsiva. Pero, en realidad, le está diciendo que si supiera la verdad vendría a ayudarla”, indica. De hecho, Sirvent resalta que es el resultado de una generación a la que le han vendido que la felicidad está a tan sólo un paso. “Ahí tienen mucho que ver la publicidad y la televisión. Por eso ella espera que cambiando de lugar todo se solucione de golpe”, dice.

Más allá de la calidad literaria, la obra de la iliturgitana destaca por ser un “monólogo interior” en el que la protagonista se ve presionada por tener la vida resuelta, pero que su propia inmadurez se lo impide. “Sueña con una vida perfecta”, explica. Escrita con un lenguaje cercano y accesible a todo el que decida adentrarse en el mundo de Ágata Ponce, la autora recurre a una estructura sencilla, es decir,  que el lector no encuentre dificultad alguna. Sin embargo, el proceso de creación no fue nada fácil. “Fue duro porque la protagonista tiene un lenguaje cruel por su insatisfacción y, al mismo tiempo, tierno. Pero cuando la terminé me ayudó a darme cuenta que no importa el concepto de felicidad”. Dos años de lucha entre la iliturgitana y Ágata Ponce que la llevó a más de un “dolor de cabeza”. “A veces perdía el tono de la protagonista y la dejaba, y otras me absorbía hasta el punto de que me costaba desconectar de mi vida real”, confiesa Sirvent, que actualmente vive en Barcelona. Una historia de descubrimientos en los que la primera en aprender fue la escritora, que publica con orgullo su primera novela y que le brinda la posibilidad de caminar en este mundo.

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