No te asustes, es algo normal. El paso del tiempo, la excesiva exposición al sol y los cambios hormonales como el embarazo, son algunas de las causas de la aparición de manchas y rojeces en la piel. Si este es tu caso y quieres encontrar el tratamiento que más se adapte a ti y a tus necesidades, es imprescindible que un especialista médico estudie tu caso a través de un examen personalizado.
¿Por qué aparecen manchas en tu piel?
La edad, la excesiva exposición al sol, las terapias hormonales, el tipo de piel o las malas costumbres en la dieta o uso de algunos cosméticos, son algunos de los factores que perjudican la aparición de este problema.
El melasma es un problema de pigmentación que afecta especialmente al rostro. Estas manchas de tipo irregular y de color “café con leche” suelen aparecer en el labio superior, las mejillas y la región central de la frente.
Existen varios métodos para paliar y hacer desaparecer, en un gran porcentaje, las manchas de piel. Estos tratamientos reducen o eliminan el pigmento existente pero, el menor abandono de los cuidados o tratamientos, conduce a su reaparición. Los datos indican que el 85% de los pacientes disminuyen considerablemente sus manchas (unos seis meses después), pero es imprescindible ser constante en la aplicación de los productos y prevención para evitar nuevas pigmentaciones.
Tratamientos para la eliminación de manchas
Existen diversos tratamientos con los que atenuar e incluso eliminar las manchas faciales, recuperando la luminosidad e hidratación de la piel.
-Peeling: es una técnica de exfoliación que consiste en aplicar una sustancia química corrosiva sobre la piel para obtener una destrucción limitada y controlada de la epidermis y de la dermis e inducir la regeneración de las capas destruidas y estimular las capas subyacentes.
El resultado: una piel más luminosa, más joven, más limpia, uniforme, compacta y elástica. Además, sirve para eliminar las manchas faciales, disminuir las arrugas y las marcas de acné.
- Luz pulsada: es un tratamiento donde se aplican pequeños impulsos de luz en la mancha a tratar. El resultado: reducción de manchas, rojeces y alteraciones de la piel como consecuencia del paso del tiempo
- Despigmentantes caseros: la aplicación de despigmentantes reduce la capacidad de la piel para volver a fabricar pigmentos. Suelen estar compuestos de ácido ferúlico y kójico y será un dermatólogo quien te aconseje sobre cómo debes utilizarlos. Es un tratamiento ideal para aquellas personas que tengan manchas recientes en su piel.
Tipos de peeling
Los más demandados son:
- Peelings de Vitamina C: un peeling químico superficial desarrollado que contiene una solución de ácido salicílico tamponada a un pH óptimo. Es muy eficaz y seguro y produce una exfoliación suave y superficial. Se aplican varios despigmentantes en forma de mascarilla que debe permanecer en el rostro durante 5 horas retirando gran cantidad de pigmento acumulado en la piel y mejorando así su apariencia. Con ello, contribuye a alisar las arrugas finas, a mejorar la coloración de la piel, a atenuar las cicatrices de acné y el daño que inducen los rayos ultravioletas y los factores ambientales (frío, calor, polución) en la piel.
- Peeling de Fenol: es un revolucionario peeling químico de uso médico, eficaz y seguro y nivel acción es más profundo que otros peeling superficiales. La renovación celular o exfoliación que produce es mayor y el efecto en la piel es más rápido y espectacular. Está recomendado a partir de los 30-35 años para mantener la piel sana, luminosa y protegida frente a agresiones externas. Con la aplicación del peeling en forma de mascarilla durante 4 sesiones se reducen arrugas superficiales, manchas y signos del envejecimiento.
- Peeling Glytone: el Ácido Glicólico es un activo comúnmente utilizado por los dermatólogos desde hace décadas para revitalizar la piel, atenuar las primeras arrugas y dar luminosidad a la tez. Con este peeling se facilita la exfoliación de las capas superficiales del stratum corneum y se induce a una estimulación de la síntesis del colágeno.
El fotorejuvenecimiento mediante luz pulsada es ideal cuando nos encontramos con pieles que presentan alteraciones pigmentarias por toda la cara tras una larga exposición al sol o por determinados cambios o tratamientos hormonales.
La luz pulsada es una fuente lumínica de alta intensidad que abarca un rango más o menos estrecho de colores cada uno de los cuales con un efecto diferente en la piel. La luz actúa como un bisturí inteligente y barre todas las estructuras indeseables o lesiones oscuras de la piel.
Este sistema es idóneo para eliminar las consecuencias del paso del tiempo y la exposición solar sin tiempos de baja. El tamaño del poro y la profundidad de las arrugas se reduce y ayuda a sintetizar nuevo colágeno en la dermis, reduce las manchas tanto oscuras como rojas, mejora la textura de la piel y reduce el acné.
Las sesiones se repiten mensualmente y los resultados se observan desde la primera sesión. Es recomendable realizar entre 3 y 6 sesiones a lo largo de los años para poder observar la efectividad del tratamiento.
Evita la aparición de manchas
Con el paso del tiempo es inevitable que nuestra piel empiece a tener manchas y rojeces. Por ese motivo, hidratar nuestra piel y cuidarla son dos formas de sentirse bien y tener buen aspecto.
Estas son algunas pautas que deberías adoptar para evitar la aparición de manchas en la piel:
• Utilizar crema solar protectora cada día de forma regular.
• Evitar exposiciones intensas o prolongadas al sol.
• Alimentarse de forma saludable y consumir frutas y verduras frescas.
• Aplicar cremas hidratantes para mantener suave la piel y evitar la sequedad.
Si a pesar de seguir estos pasos tu piel sigue con esas molestas manchas, te recomendamos combinar tratamientos de peeling, luz pulsada y despigmentantes para conseguir una piel más luminosa de cara a los demás y a ti misma.
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