Durante la boda civil se tiene previsto que los novios firmen los registros con un bolígrafo, especialmente diseñado por la reconocida empresa Montblanc, el cual tendrá incrustaciones de piedras preciosas y será pieza única que tendrá un sello de la pareja.
Luego, teniendo en cuenta el plan de celebración de Mónaco, los recién casados se reunirán con personalidades de alto calibre, con el fin de consentir el paladar con un prometedor buffet, preparado por el Fairmont Monte-Carlo.
Esta casa culinaria, sorprenderá a los invitados con platos mediterráneos y algunos típicos de Sudáfrica, en honor a la novia. También se puedo conocer que la pareja brindará en compañía de los invitados, con botellas exclusivas de Champagne Perrier-Jouet.
Para finalizar el día con broche de oro, quienes conforman el Principado y algunos privilegiados, están invitados a una recepción que contará con un paisaje de onírico, el puerto. Tendrán la oportunidad de bailar al ritmo del compositor e intérprete francés de música electrónica, Jean-Michel Jarre, quien es el encargado de homenajear a los recién casados.
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