Alicia Keys, una futura mamá feliz, ¿una futura mamá inconsciente?

¡Se confirman los rumores! Alicia Keys no sólo se casará a finales de este año con su actual novio, el productor Swizz Beatz, sino que además la vocalista está esperando su primer hijo. Ahora bien, quería aprovechar las sonrisas y las innumerables muestras de felicidad que exhibe la artista norteamericana para reflexionar acerca de la necesidad de dar a luz en una actualidad arruinada por la crisis económica, la violencia generalizada, el paro, las drogas como vía de escape, las enfermedades o los conflictos socio-políticos. ¿Qué sentido tiene procrear cuando millones de recién nacidos, niños y adolescentes sufren la hambruna o las guerras en unos territorios no muy lejanos a nuestros hogares?


Quizá todos tengamos que tomar ejemplo de la pareja ‘perfecta’: Brad Pitt/Angelina Jolie. Millonarios pero conscientes del estado delicado por el que está atravesando la humanidad, ambos han optado por la adopción, una alternativa inteligente, solidaria y bella. Y con esto no estoy criticando a Alicia Keys. Ella es libre de hacer lo que quiera. Sin embargo, probablemente haya llegado el momento de ver el término "descendencia" desde otra perspectiva y definirla como algo equivocado, egoísta y conservador. ¿Hasta qué punto es ético quedarse embarazada?

Aquí van unas cuantas estadísticas, unos argumentos para apoyar mi teoría:

- Más de 1.000 millones de personas viven actualmente en la pobreza extrema (menos de un dólar al día).

- Más de 1.800 millones de seres humanos no tienen acceso a agua potable.

- 1.000 millones carecen de vivienda estimable.

- 840 millones de personas mal nutridas.

- 2.000 millones de personas padecen anemia por falta de hierro

- 880 millones de personas no tienen acceso a servicios básicos de salud.

- 2.000 millones de personas carecen de acceso a medicamentos esenciales.


Hay que actuar según el momento que nos ha tocado vivir. Y este, en pleno 2010, no es el de los caprichos, sino el del sacrificio y el de la ayuda a terceras personas.
por Woodstock